Unos ocho mil católicos realizaron una peregrinación a San Cristóbal de las Casas para manifestarse contra la opresión del sistema. Durante la homilía, el Obispo Felipe Arizmendi Esquivel manifestó:
“Sólo con la fuerza de Dios nos mantendremos firmes en proteger y cuidar la madre tierra, en valorar a los jóvenes y a las mujeres, en no descansar hasta que se libere a los cautivos inocentes, en trabajar por la pacificación y tranquilidad de nuestro país, en erradicar la corrupción y sembrar la honestidad”.
Aludiendo a un pasaje bíblico, dijo:
“Los leones son las empresas mineras, los proyectos que pretenden apoderarse de territorios de los campesinos, las autoridades corruptas que se venden y no defienden el bienestar de las comunidades y los que se dedican a la tala inmoderada de los bosques. Asimismo, las grandes empresas cerveceras y fabricantes de alcoholes, los cantineros, las autoridades que por corrupción no aplican debidamente las leyes de salud. Leones son también, “los vendedores y distribuidores de drogas, pequeños y grandes; los jefes de cárteles y sus lugartenientes; los que extorsionan y secuestran para sacar dinero; los que ejecutan a quienes no siguen sus indicaciones criminales; los que atrapan y desgarran a los migrantes que pasan entre nosotros”.