Desde que Adrián Acosta fuera desaparecido el 17 de febrero de 2010, su familia no ha parado de buscarlo. La información y los presentimientos les hacen pensar que el suyo puede ser uno de los cuerpos exhumados en la fosa común del panteón municipal de Jojutla.
Tras la desaparición, su familia interpuso una denuncia y, a partir de ese momento comenzaron a recorrer fosas de diferentes municipios hasta llegar a la narcofosa ubicada en Puente de Ixtla, Morelos. En el predio al que tuvieron acceso, vieron un cadáver que coincidía con las características de Adrián Acosta, sin embargo, la Fiscalia General del Estado no permitió a la familia acceder a la Carpeta de Investigación y ordenó inhumar los 11 cuerpos en el panteón municipal de Jojutla sin confrontar perfiles de ADN.
La familia ha continuado buscando a Adrián incasablemente sin resultado. “Del caso de Tetelcingo también nos sacaron muestra de ADN, pero nunca nos dice o nos llaman ‘oiga, mire aquí está su prueba de ADN, y no está su hijo acá, no aparece’. Se supone que si le están sacando el ADN es para confrontarlo con los cadáveres y nunca nos dieron una respuesta, yo no sé cómo trabaje el Gobierno, ellos no son sus hijos, ellos están cobrando su dinero, están sentados en el escritorio y los pinches ADN ahí arrumbados, cuando su función es checarlos”, lamentó.
* Con información de Zona Centro Noticias.