*Las agresiones se incrementaron desde su participación en una mesa de diálogo con Segob en torno al conflicto magisterial, denuncia red de defensoras.
Ciudad de México, 20 de julio de 2016. La Red de Mujeres Activistas y Defensoras de Derechos Humanos de Oaxaca denunció persecuciones y hostigamientos contra las defensoras mixtecas Adriana Marcelina Linares Arroyo y Rubí Jazmín Cortés Salazar, quienes han sido parte de la delegación de diálogo con la Secretaría de Gobernación.
La Red denunció que el día 14 de julio cerca de las 20:30 horas, Adriana Marcelina Linares Arroyo y Rubí Jazmín Cortés Salazar se dirigían a la Ciudad de Tlaxiaco cuando vieron que su vehículo fue fotografiado y posteriormente fueron seguidas por un automóvil, lo que «se da en el marco de una serie de graves violaciones a derechos humanos y ataques contra las defensoras, el movimiento social y magisterial así como contra padres y madres de familia y la población civil oaxaqueña en resistencia contra la implementación de les reformas estructurales impulsadas por el Gobierno Federal», situación en la que las defensoras han sido fundamentales.
Rubí Jazmín Cortés Salazar es integrante de la Alianza Multicultural De Mujeres Originarias y Radicadas en Tlaxiaco (AMMOR) y presidenta del Comité de Defensa de la Educación Pública del Sector 01 Tlaxiaco, mientras que Adriana Marcelina Linares Arroyo es la Coordinadora General de la Coordinadora Estatal de madres, padres de familia y tutores en defensa de la educación laica y gratuita.
La red de defensoras relató que los episodios de vigilancia telefónica, difamación, criminalización, seguimiento en sus diversas actividades laborales y desplazamientos, intimidación y amenazas telefónicas y escritas con calumnias sexistas comenzó a partir de su aparición en medios de comunicación.
En una carta abierta al secretario de Gobernación federal, Miguel Ángel Osorio Chong, la red destacó que a partir de la participación de las defensoras en una mesa de diálogo con el funcionario el 22 de junio del 2016, los ataques en su contra se incrementaron. «En este marco, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) solicitó al gobierno del Estado de Oaxaca medidas cautelares para su protección. Cabe destacar que la primera respuesta por parte del Estado fue la negativa de aceptación y fue hasta una segunda solicitud que aceptó», denunciaron.
Las mujeres defensoras responsabilizaron a los gobiernos federal y estatal de la vida, integridad física, psicológica y de la seguridad jurídica de las defensoras frente al alto riesgo en el que se encuentran, especialmente ante el alarmante aumento de agresiones contra mujeres defensoras en el estado de Oaxaca. Exigieron el cese de los ataques contra las defensoras y garantías para la integridad física y psicológica de Rubí Jazmín Cortés Salazar, Adriana Marcelina Linares Arroyo y de sus familiares, además de una investigación y sanción en contra de los agresores «dado que la impunidad ha generado un clima de permisibilidad».