
Cuando se juntan las malas noticias suele decirse que llueve sobre mojado. Este mismo dicho se le puede aplicar al Gobierno de la Ciudad de México. Aquello que pronosticó como un éxito, que anunció con bombo y platillo, le duró dos días. Me refiero a su campaña sexista “No le des la espalda, dales pecho”, la cual tardó más en anunciarse que el rechazo que provocó en las redes sociales. El chistecito, según algunas de las cifras que se manejan, costó a la ciudadanía del Distrito Federal 14 millones de pesos. Lucía Lagunes Huerta /Cimacnoticias