Por Simón Hernández León/Centro Prodh
México, DF.- El día de ayer se llevó a cabo la primera jornada del Foro Nacional sobre Delitos del Pasado, con el propósito de analizar el caso mexicano sobre los delitos de lesa humanidad, cometidos por el Estado en el periodo denominado como “guerra sucia” y, a la luz de otras experiencias en América Latina que han avanzado en procesos de verdad, justicia y reparación.
En la primera intervención, la jueza guatemalteca Yassmín Barrios, quien encabezó el proceso contra el ex presidente Efraín Ríos Montt en ese país, realizó una exposición sobre la imprescriptibilidad, de delitos que por su gravedad, pueden ser investigados y sancionados en cualquier tiempo: crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad, genocidio y apartheid.
“El derecho tiene una memoria selectiva” señaló la jueza Barrios, sin embargo, hay delitos que por su gravedad “viven en la memoria colectiva y no se agotan pues por el daño tan grave e irreparable que se ha ocasionado no pueden ser olvidados”. Consecuentemente, si las sociedades no olvidan estos hechos no pueden ser obviados por el derecho. «Se necesita voluntad política y jurídica para acceder a los crímenes de lesa humanidad».
La juzgadora concluyó afirmando que en América Latina, la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad está fundamentada en tratados internacionales, en la jurisprudencia emitida por la Corte Interamericana y en la costumbre internacional.
Por su parte, Daiana Fusca, integrante del argentino Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), organización que ha participado en Argentina en procesos legales como el encausado por los crímenes cometidos por las víctimas de la dictadura militar, señaló que en ese país sucedieron “ataques sistemáticos y generalizados” no sólo contra militantes políticos, sino contra la población civil, que en expresiones de un militar argentino debía abarcar “a los tibios, a los que simpaticen o a los que se les acerquen”; a lo que la dictadura militar denominó enemigo interno y subversivo y que justificó una lógica de aniquilamiento en ese país.
El proceso argentino incluyó la creación de una Comisión de la Verdad, procesos penales seguidos bajo el derecho interno, modificaciones constitucionales recomendaciones de la Comisión Interamericana, declaración de inconstitucionalidad de las leyes de impunidad y prescripción emitidas tras el fin de la dictadura militar y una declaración del Congreso que a instancia del Ejecutivo realizó una declaración de nulidad de estas leyes. Este acto tuvo un impacto significativo ya que fue un acto político que evidenció la voluntad del Estado de asumir la responsabilidad por estos crímenes.
Finalmente, la historiadora del Centro de Investigaciones Históricas de los Movimientos Sociales Florencia Cruz, destacó que en México, las investigaciones de la Fiscalía Especializada en Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp) contienen elementos sólidos de investigación histórica y documental y de rescate de la memoria, lo cual podría ser utilizado en la determinación judicial de responsabilidades.
Sobre la actuación de las fuerzas armadas en el estado de Guerrero, señaló que el Ejército “fue utilizado como uno de los recursos ordinarios tradicionales de uso de la fuerza para dirimir asuntos de política interna”. Las fuerzas armadas asumieron labores policíacas y de represión de alto impacto, posteriormente desarrollaron una estrategia de contrainsurgencia, ataques a la población y un “genocidio sistemático”, enfatizó Florencia.
El foro fue convocado por la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos en México, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, A.C., el Comité 68 Pro Libertades Democráticas A.C., el Comité de Madres de Desaparecidos Políticos de Chihuahua, la Fundación Diego Lucero, Fundar Centro de Análisis e Investigación, Nacidos en la Tempestad, la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos, y Unión de Madres con Hijos de Desaparecidos de Sinaloa.
“Cuando empezaron a desaparecer
como el oasis en los espejismos
a desaparecer sin últimas palabras
tenían en sus manos los trocitos
de cosas que querían
están en algún sitio / nube o tumba
están en algún sitio / estoy seguro
allá en el sur del alma…”
Mario Benedetti