La Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, difundió mediante un comunicado que el 23 de julio, la empresa Tradeco y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) invadieron sin ningún permiso legal las tierras comunales del municipio de Tepoztlán, Morelos, con la presencia intimidatoria de granaderos y policía estatal y federal.
Las y los pobladores de esta comunidad se mantuvieron varias horas haciendo una valla humana en el límite de las tierras comunales y ejidales de dicho municipio, teniendo frente a frente a un grupo de granaderos que apuntalaban el avance de la maquinaria que iba desgajando ilegalmente la montaña con árboles y maleza del parque nacional el Tepozteco.
Durante varias horas las y los habitantes de esta comunidad permanecieron resguardando el límite de las tierras ejidales y comunales, a la vez que detenían el tráfico vehicular de la autopista la Pera-Cuautla por intervalos breves de tiempo extendiendo mantas alusivas a su desacuerdo con la ampliación de dicha autopista, la cual afectará ambientalmente sus tierras comunales, declaradas parque nacional el Tepozteco y corredor Biológico Ajusco Chichinautzin, la capatación de agua para todo el estado de Morelos, además de que detonará procesos de especulación inmobiliaria y urbanización salvaje que no beneficiarán a la comunidad sino a las grandes empresas nacionales y extranjeras como Tradeco dedicadas a este tipo de actividades.
Después de horas de negociación, se logró un acuerdo con el presidente municipal de Tepoztlán, Francisco Navarrete Conde, en donde se comprometió a cumplir con las obligaciones que señala el Bando de Policía y Buen Gobierno, de acuerdo con la legislación que rige en el estado de Morelos, y a cumplir con su obligación de defender «la integridad del territorio y de las personas que en él habitan, apele a la soberanía popular y a la autonomía municipal y tome todas las acciones legales y legítimas necesarias, mismas que debe llevar hasta sus últimas consecuencias.
Compromisos sin cumplir
La represión se recrudece. En lugar de que llegara el regidor de medio ambiente a clausurar la obra, como se había comprometido el presidente municipal ayer, llegaron los policías a desalojar a quienes acudieron a verificar el cumplimiento del compromiso del presidente municipal. En este momento hay cerca de 70 policías rodeando la presidencia, tanto frente a los arcos como por el lado del auditorio. Temprano subieron a un joven a una patrulla, pero la gente logró que lo soltaran. La situación es bastante tensa. Siendo miércoles, hay mucha gente en la plaza, es difícil determinar cuánta gente está activamente en el mitin y cuántos son comerciantes o compradores habituales, pero en cualquier caso la situación es tensa.