La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) declaró a México «responsable internacionalmente por la desaparición forzada cometida en perjuicio de Antonio González Méndez», base de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), desaparecido por el grupo paramilitar Desarrollo, Paz y Justicia el 18 de enero de 1999, en el marco de la contrainsurgencia en Chiapas.
«Es un día histórico para el movimiento zapatista, para la familia de Antonio y también para las víctimas del terrorismo de Estado ejercido por el gobierno mexicano en la época de los 90. La Corte deja en claro que el Estado emprendió una estrategia de contrainsurgencia y que esas prácticas generaron los grupos paramilitares que eventualmente desaparecieron a Antonio», dijo a Desinformémonos Emiliano Vergara, del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba).
En la resolución, la Corte también responsabiliza al Estado mexicano de las «otras violaciones a derechos humanos» de González y de sus familiares, y aceptó el reconocimiento parcial de responsabilidad efectuado por el Estado por «la falta de una investigación adecuada de los hechos y a la afectación a la integridad personal de los familiares del señor González Méndez».