A un año de la toma de La Glorieta de las y los Desaparecidos, organizaciones y familiares celebraron la resignificación del espacio.
Realizaron un acto ecuménico y encendieron velas, como acto simbólico, para iluminar el camino de cada una de las personas que no han vuelto a casa y para exigir a las autoridades investigación y búsqueda. Además condenaron los asesinatos de personas buscadoras en el actual sexenio.
Las familias hicieron un llamado a la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, a la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, y a la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, para que se respeten los sitios de memoria.
Las y los participantes, convocaron a más familiares de personas desaparecidas y a la ciudadanía a sumarse a una movilización el próximo 30 de agosto a las 12:00 horas, en el marco del Día Internacional contra la Desaparición.
Actualmente existen en México más de 111 mil personas desaparecidas o no localizadas. La glorieta surgió ante esta situación como un antimonumento de memoria en Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México.