El sostén de su familia
Por Emmanuel Ridderstrom
Jesús Jovany Rodríguez Tlatempa nació un 24 de diciembre, en Chilpancingo, Guerrero, con un característico lunar en la parte izquierda del cuello. Es el primero de los tres hijos de María Concepción Rodríguez Tlatempa y Alfonso Rodríguez. Su familia le dice de cariño Jova; sus amigos: el Churro, por su lunar.
Con pocos meses de edad, Jova debió mudarse al Distrito Federal porque su padre consiguió trabajo en la Marina. La familia vivió en San Lorenzo Tezonco hasta que su padre decidió dejar el servicio. Cuando regresó a Tixtla, Jova tenía siete años y debía cursar el segundo de primaria. Sus padres lo inscribieron en el internado Adolfo Cienfuegos y Camus, en Chilapa, donde sólo podían verlo los fines de semana. Ahí cursó toda la primaria. La secundaria y la preparatoria las hizo en Tixtla.
Cuando sus padres se separaron, Jova se convirtió en el principal apoyo de su madre, de sus hermanos y de su sobrina. Para seguir ayudando a su familia, decidió que lo mejor era buscar una escuela que no representara un gasto mayor. Con esa idea llegó a la Normal de Ayotzinapa, donde tendría un lugar donde dormir, lo prepararían profesionalmente y estaría cerca de su familia.
Jesús Jovany Rodríguez Tlatempa, el Churro, es, en palabras de sus compañeros y maestros, un hombre puntual, comprometido con el trabajo, que alienta a sus compañeros cuando los ve flaquear. Un hombre que se levanta temprano para hacer ejercicio, al que le gusta jugar futbol y que reza cada noche antes de dormir.
Texto perteneciente a la campaña Marchando con letras
Ilustración de Matz Estrada.
Tomada del portal #IlustradoresConAyotzinapa